Cruzó a nado el canal de la Mancha en 2012; dio la vuelta la isla de Manhattan en 2014 y completó la travesía en aguas abiertas del canal de Santa Catalina en 2015. Hasta ahora solo 147 ‘deidades’ de la natación han logrado la Triple Corona que otorga The World Open Water Swimming Association y el nadador alicantino Jorge Crivillés es una de ellas.
Hace casi un año, en 2016, ni los fuertes vientos, las corrientes marinas o las olas gigantes de tres y cinco metros de altura del canal de Molokai en Hawai lograron evitar que Crivillés completara un nuevo desafío.
El próximo 27 de julio le espera la fiereza de las aguas del canal de Tsugaru en Japón. 30 kilómetros a nado con temperaturas que oscilan entre los 16 y los 13 grados; corrientes imprevisibles y una peligrosa fauna de tiburones, medusas y serpientes marinas. Solo 27 nadadores han superado una prueba solo apta para auténticos “espartanos”.
Si Crivillés logra alcanzar la orilla de la isla de Honshu habrá completado cuatro de las siete pruebas del Oceans’ Seven. Solo tres travesías -el canal del Norte, el estrecho de Cook y el estrecho de Gibraltar- le separarán del Olimpo de los Dioses.
Durante su aventura en Japón, le acompañarán su entrenador, José Luis Larrosa; una embarcación de seguimiento; piraguas de avituallamiento y un barco pesquero que le guiará en una travesía que hará posible el respaldo de la Fundación ASISA. Pero, fundamentalmente, le acompañarán el cariño y el agradecimiento del Grupo Español de Pacientes con Cáncer (GEPAC). Y es que este reto, va por ellos. Desde esta orilla virtual, ahí va también nuestro aplauso más fuerte y toda nuestra energía.